Adiós al miedo, la pereza, la vergüenza, el despiste… Se acabaron las excusas recurrentes para no ir al dentista. Tenemos la mala costumbre de retrasar todo lo que es importante o conveniente para nuestra salud. ¿Por qué lo hacemos si cuando no hay salud no hay nada? Esto sería objeto de un estudio minucioso, pero lo que está claro es que lo hacemos la mayoría de los mortales.
Cuando trabajas, porque no tienes tiempo… Cuando estás de vacaciones, porque no quieres desaprovechar ni un segundo… Cuando estás en el paro, porque no tienes dinero… Porque, porque, porque, porque, porque y porque. Siempre dando explicaciones e intentando convencernos a nosotros mismos de nuestras triquiñuelas para evitar lo que al final es inevitable, y en muchas ocasiones con peores consecuencias.
Una vez nos hemos decidido a ir al dentista, en la mayoría de ocasiones cuando el dolor ya nos corroe y no queda otra salida, llega la pregunta. ¿A dónde voy? Normalmente buscas una clínica referente en tu familia, a la que por tradición siempre hayan acudido, o si no tiras mano del listín telefónico o Internet. Pues como seguro que ya estás rabiando del dolor y no tienes tiempo que perder, enciende tu ordenador y accede a www.isabelnavarromontes.com. Te acabará de convencer y no te arrepentirás de la elección.
Isabel Navarro y Luis Peso disponen de clínica dental en Valdepeñas y Ciudad Real. Son profesionales. Son dentistas de confianza. Que al fin y al cabo es lo que todos buscamos. Cuando llegas, un ambiente moderno pero a la vez cálido, ayudan a quitarte los nervios del principio. Cuando conoces al personal, ya te acabas de relajar y te das cuenta de que estás en buenas manos.
Y repetimos, al dentista no sólo hay que ir en momentos extremos y cuando ya no tenemos más remedio. Debemos cuidar nuestra boca, mantenerla siempre sana. En este sentido, es necesario hablar de la ortodoncia, la especialidad que ayuda a prevenir y corregir alteraciones en nuestros dientes. Y es que además de mejorar nuestra dentadura, nos ayuda a embellecer nuestra cara.
¿Quién no quiere sentirse bien por dentro y por fuera? Hay que hacer un esfuerzo y ser conscientes de que lo que no se ve también es fundamental y repercute en todo lo demás. Una dieta equilibrada, deporte diario y acudir a los especialistas con asiduidad para prevenir futuros incordios, deberían estar presentes en nuestro día a día y ser una obligación.