De acuerdo, tienes razón, ahora mismo la crisis nos está impidiendo disfrutar de una forma correcta y adecuada de esos platos bien cocinados que siempre hemos degustado en los restaurantes. Está claro que la falta de dinero cash (como afirmó aquella celebridad de la tele) nos ha puesto una frontera invisible que es imposible de traspasar. Es complicado llegar al otro lado, porque el salvoconducto es un billete de una cantidad determinada. Y la verdad, ahora mismo de eso, poco.
De ahí que tengamos la necesidad de contar con una página como canalrestaurantes.es, en la cual podremos alternar las mejores satisfacciones personales con la atención más individualizada y el precio más atractivo. Porque nosotros tenemos clara una cuestión: de acuerdo, estamos en crisis, pero tendremos que seguir viviendo, ¿no crees? Por eso te recomendamos que sigas confiando en el buen formato que te ofrecen los restaurantes españoles, los cuales permiten una conjunción excelente entre menús imaginativos y de calidad con precios cada vez más reducidos.
Si no te crees esto último te invitaríamos a que te dieras una vuelta por una zona donde se acumulen este tipo de negocios. Seguramente verás un montón de tablillas en las que se anuncien ofertas suculentas con primero, segundo, postre, pan, vino y café por una sola cifra. Es más, en algunos lugares de comida hemos podido comprobar la existencia de los famosos menús anticrisis, los cuales se ofrecen al público por 5 o 6 euros. No nos negarás que no es atractiva la cuestión…
Así que sí, sabemos que ahora mismo todos estamos bajo mínimos, atenazados por esta situación financiera que en lugar de progresar positivamente está decreciendo notablemente. Pero también somos conscientes de la necesidad que tiene el ser humano de salir, de alternar, de conversar con amigos, familiares o pareja en una mesa de un restaurante. Quizá todo ello forme parte de nuestra peculiar cultura nacional, o tal vez sea una cuestión que atañe a nuestra idiosincrasia mediterránea, pero no podemos olvidar que ahora mismo acudir a un restaurante supone lo mejor que podemos hacer para olvidar los efectos negativos de la crisis. Si para adquirir un recambio de coches vamos al desguace al objeto de ahorrar y seguir disfrutando con nuestro coche, ¿por qué no hacemos lo mismo a la hora de disfrutar de nuestro tiempo de ocio?